Pensaba que tan solo se podiá echar de menos
aquello que has tenido alguna vez.
Yo nunca te he tenido y, sin embargo,
vivo atada a la obsesión de perderte sin querer.
Y no paro de pensar:
¿qué voy a hacer si te he dado lo que soy
pero para ti nunca es suficiente?
¿qué voy a hacer si te he dado todo lo que soy?
Pero ya comprendí que nada es suficiente para tí
Vengo de un mundo de imposibles
y allí los imposibles son posibles.
Y yo he soñado alguna vez
que tú y yo eramos felices
y nada se podía interponer;
creo que me equivoqué.
Y no paro de pensar.
¿Qué voy a hacer si te he dado lo que soy
pero para tí nada es suficiente?
¿Qué voy a hacer si te he dado todo lo que soy
pero ya comprendí que nada es suficiente para tí?
Y no paro de pensar
qué haría si no estás
pero esto es demasiado para mí,
saber que no puedo hacerte feliz.
¿Qué voy a hacer si te he dado lo que soy
pero para tí nada es suficiente?
¿Qué voy a hacer si te he dado lo que soy?
Pero ya comprendí que nada es suficiente para tí.
Nada es suficiente, nada es suficiente,
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