martes, 10 de abril de 2007

De torrijas

Aunque la Semana Santa ya ha acabado, puede que os hayáis quedado con ganas de hacer unas ricas torrijas caseras, para vosotros o para toda la familia. No pretendo dar aquí la receta en sí, sino comentar algunos aspectos de este rico y tradicional dulce que conviene tener en cuenta a la hora de hacerlo. Si ya sois unos expertos/as en este plato es posible que mis comentarios no os sean de ayuda, ya que son bastante básicos y dado que yo tampoco soy una especialista (¡aún!) en torrijas. Comenzaremos hablando del PAN. Es el ingrediente básico de este dulce y es importante saber cuál elegimos para que, a la hora de empacharlo en leche, no se quede demasiado seco ni demasiado empachado, ya que, en el primer caso, no serán agradables a la hora de comer; y en el segundo, se nos podrían deshacer y/o partir antes de llegar a la sartén. Podemos utilizar prácticamente cualquier pan, si bien hoy en día las panaderías ofrecen los llamados "pan de torrijas" en Semana Santa. Veamos algunos de ellos: - pan de torrija tipo brioche: la masa utilizada es muy similar -si no la misma- que la empleada para hacer las medias noches o los brioche. Es una masa muy porosa y aromatizada que absorbe la leche muy rápido, por eso no conviene dejarla en leche más de cinco minutos, ya que se deshace en seguida. La ventaja es que, al ser una masa tan sabrosa, nos permite saltarnos el paso de aromatizar la leche con canela y naranja; con disolver un poco de azúcar en ella es suficiente. Por mi experiencia, aunque puede que me equivoque, éste pan absorve menos leche que el pan común. No es necesario dejarlo secar uno o dos días como ocurre con otros panes. Con este pan, lo veréis sobre la práctica, hay que hacer todo el proceso seguido: esponjar en leche, rebozar en huevo y freír, dejando esponjar la siguiente tanda de rebanadas mientras se fríe la anterior. - pan de torrija "común": es una masa más blanda y porosa que la del pan cotidiano, de corteza más suave. En este caso sí conviene esperar al día siguiente de su compra, para que se endurezca un poco. La masa no suele tener aromatizantes de naranja o canela, de modo que es preferible que aromaticemos la leche antes de utilizarla. Dejaremos reposar el pan en la leche tibia o algo caliente durante una media hora, después extraeremos las rebanadas y las dejaremos reposar unos 5 minutos (mientras se calienta el aceite, por ejemplo). Con este pan podemos empachar todas las rebanadas a la vez e ir rebozando y friendo paulatinamente. - pan común: aquí podemos distinguir entre la barra y las hogazas, ya que la masa de estas últimas suele ser más compacta. En ambos casos hay que dejar secar el pan durante uno o dos días. La corteza es más dura que la de los panes específicos para torrijas, así que necesitará estar más tiempo en remojo. Ésta (la leche) tiene que estar bien aromatizada, para que el resultado final sea más sabroso. Un truco para conseguir que el pan esté duro de forma homogénea (tanto por dentro como por fuera) es introducirlo en una bolsa de plástico cerrada con un nudo suelto y dejar secar durante varios días. Aunque podemos utilizar este pan sin ningún problema, las torrijas hechas con este pan suelen secarse antes que aquellas que se hicieron con "pan de torrija".
Respecto al pan es también muy importante el grosor de las rebanadas: entre dos y tres centímetros; si son más finas se partirán con el peso de la leche. La LECHE puede ser entera, semi o desnatada, y si alguien tiene alergia puede sustituirse por leche de soja. En cualquiera de los casos, para aromatizarla pondremos la leche al fuego con la cáscara de una naranja previamente lavada, un trozo de canela en rama y, si se quiere, tres o cuatro clavos, y lo dejaremos hervir a fuego lento durante una media hora. Deberemos remover de vez en cuando, retirando la capa de nata que se forma en la parte superior. Cuando esté lista apartaremos la olla o cazo del fuego y le añadiremos el azúcar (si lo hiciésemos antes se nos podría pegar al fondo de la olla). Dejaremos enfriar entre cinco y diez minutos, más si queremos esponjar el pan en leche tibia. Por lo general un litro y medio de leche es suficiente para una barra de pan. Si no podéis tomar azúcar por cuestiones médicas, podéis hacer unas torrijas light: basta con sustituir el azúcar de la leche por sacarina; eso sí, tendréis que adornar tan sólo con canela y prescindir del jugo con las que se las suele bañar. Ese ALMÍBAR o jugo que suele bañar las torrijas varía bastante según la cocinera. Debe de haber decenas de recetas, yo os propongo tres variedades: - sólo de azúcar: para ello pondremos a hervir en un cazo 6 cucharadas de agua y 5 cucharadas de azúcar; iremos removiendo hasta que se deshaga el azúcar y espese. - de leche y caramelo: calentaremos el azúcar en un cazo hasta conseguir un caramelo suave; después echaremos leche e iremos removiendo hasta que el caramelo se deshaga en la leche. - y de naranja, miel y azúcar (mi preferida porque tiene un punto ácido): necesitaremos el zumo de una naranja, colado, dos/tres cucharadas de agua, tres cucharadas de miel y tres de azúcar; pondremos todo a hervir hasta que espese ligeramente. Las cantidades variarán según la cantidad de torrijas que hayáis hecho y según os gusten de empapadas en el almíbar. A mí con esas cantidades me da para unas 15 torrijas. Las últimas novedades en torrijas parecen ser los rellenos: nuestra amiga Pausan las rellena de nocilla y Arguiñano de plátano. En la misma web de Karlos Arguiñano encontaréis torrijas de natillas , torrijas al vino tinto o torrijas de San José, tan sólo tenéis que buscarlas a través del buscador de la propia página. ¡Que disfrutéis con vuestras torrijas caseras!


4 comentarios:

Unknown dijo...

Muy buen post sobre las torrijas, me ha gustado mucho saber mas de ellas.
Un besin

Miranda dijo...

Vaya, ¡gracias, Pausan! He ido observando las dos últimas veces y quería compartirlo, por si a alguien le servía.

Un besito para tí!

Ariadna dijo...

Bueno, se me ha hecho al boca agua, creo que tendre que ir a tomarme algo ahora.

Muy interesante, si :), Yo no soy experta en torrijas, de hecho nunca las he hecho. De eso se encarga mi tia, y mi suegra (babas).

Me ha gustado mucho.

Besos guapa.

Miranda dijo...

Entonces espero que te sirva de algo si te da por ponerte manos a la masa, Ariadna! ;)